Música

domingo, 16 de marzo de 2014

Supongamos

Supongamos que estás hundido hasta el punto de no saber qué hacer con tu vida. Supongamos que miras arriba y ves que todo el mundo alcanza sus objetivos menos tú, que todos son felices menos tú. Supongamos que te duele tanto que no sabes si valdrá la pena esforzarse un poco más. Supongamos también que estás hasta ahí de aguantar esa situación y que tienes unas ganas impresionantes de salir y alcanzar todo lo que quieres como los demás, pero siendo tú mismo. Ahora supongamos lo que no hace falta suponer, que los saltos son más fáciles si partes desde abajo. Y ahora tú decides cómo saltar y dónde agarrarte.

Recuerda.

Todo lo que hagas en esta vida será insignificante, pero es muy importante que lo hagas, porque nadie más lo hará por ti.